MUJERES, MADRES Y SOCIEDAD


MUJERES, MADRES Y SOCIEDAD



Con el crecimiento y desarrollo de las redes sociales cada vez existe mayor divulgación de información en internet sobre cómo las mujeres tenemos que llevar nuestra maternidad y criar a nuestros hijos, es decir, un manual sobre la ‘perfecta maternidad’, lo que está estrechamente relacionado con ser una ‘perfecta esposa’, tema en auge entre la población más joven, los cuales, presumen de ser más ‘tradicionales’ en redes sociales, casarse antes , ser más creyentes y estar siempre presentable, que la gente te vea bien, como si no hubieses parido o hubieses dormido 8 horas seguidas con tus hijos en plena oleada de virus.

En resumen, lo tradicional y austero está de moda. Pero, ¿Qué supone esto para la mujer? Ya que esta supuesta moda, va dirigida sobre todo para imponer patrones a la mujer de comportamiento, cásate antes, ten hijos joven, críalos bien y sé una buena esposa.

Las que somos madres, podemos ‘disfrutar’ de contenido en Redes Sociales, en los que te enseñan cómo hacer tu día con niños más productivo; pediatras que te alertan de todas las señales de enfermedad en tus hijos para que estés alerta; canales que te hablan sobre alimentación y todo aquello que tu hijo no debe comer ,y por supuesto, donde no debes cocinar sus alimentos, por tratarse de materiales tóxicos; profesionales que te informan cómo debes afrontar la crianza y los problemas en cada etapa de la vida de los hijos, crianza positiva, etc. Todo se resume en: ANSIEDAD. CARGA MENTAL.

Es decir, las madres estamos agotadas.

La figura de la corresponsabilidad cada vez está más presente en nuestras vidas, por suerte para todas nosotras, pero ¿realmente se aplica? ¿o es todo parte del postureo de las redes sociales?

La educación que hemos recibido y la sociedad actual, hace que nos conformemos con una medio corresponsabilidad: ‘mi marido es muy buen padre porque se lleva a los niños al parque para que yo planche y recoja la casa’. Es verdad que hemos avanzado en derechos respecto a nuestras madres y abuelas, pero, ¿se ha alcanzado una corresponsabilidad equitativa y justa? ¿Existe una visibilidad real de la carga de las mujeres? ¿Nos hemos desvinculado de la eterna figura de los cuidados?

Las cifras de carga mental de las mujeres son muy altas, también los problemas mentales derivados de este exceso de responsabilidad.

La sociedad moderna no está preparada para acoger a las madres, por mucha visibilidad que se dé al problema actualmente en la televisión, redes sociales o las conversaciones cotidianas, no nos sentimos comprendidas, respetadas y mucho menos cuidadas. Las políticas gubernamentales no apoyan la conciliación y, es por ello y, por la desigualdad económica y el techo de cristal que, muchas de nosotras renunciamos a nuestra progresión laboral en años cruciales de la misma.

No hay comprensión del problema por parte del ejecutivo, pero tampoco de la sociedad, que visibiliza el problema pero luego lo critica o enmudece y, por supuesto las empresas que no facilitan en absoluto la conciliación, salvo cuando se ven obligadas por la ley.

La sociedad no es consciente de la falta de sueño de las madres que lleva a un cansancio acumulado, ni de los quebraderos de cabeza que da la economía familiar, los problemas de los niños en el colegio, los virus estacionales, y NOSOTRAS, ¿en qué lugar quedamos? ¿es qué las madres solamente tienen los problemas derivados de la maternidad? No, somos personas, mujeres y conservamos nuestra identidad después de ser madre, exigimos que se nos trate como tales y que se nos dé un lugar en la sociedad y una protección, ¿llegará algún día? Esperemos que sí, y que sea pronto.

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